Una triste llegada

«Lo primero que quiero hacer es agradecer a la Policía, Nacional y Local, y a los Bomberos todo lo vivido», decía al referirse a los primeros. Entró en Logroño escoltado, recorrió sus calles y acabó en Las Norias. «Cuando hemos llegado, nos hemos dado cuenta de la triste realidad a la que llegábamos, la realidad de los políticos», dice. Claro en sus palabras, el atleta no ha dudado en afirmar que el Ayuntamiento de Logroño «no ha hecho nada para que hubiera gente y que se recaudase dinero para Ferdis». «Siento decirlo, pero tengo que contarlo. Esta gente no se merece lo que ha pasado. Lo importante es la persona y los pueblos son de sus personas, no de quienes les gobiernan porque en muchos casos no saben gobernar», añadía. Un detalle de su pensamiento: en las trece llegadas que ha vivido, la 'meta' estaba en la plaza principal de cada pueblo. En Logroño ha terminado en Las Norias ante la imposibilidad de hacerlo en el Ayuntamiento o en El Espolón.

De momento, y con la mente aún caliente, este viernes afronta la penúltima etapa, con salida en Logroño y llegada en Autol. 60 kilómetros, los penúltimos, antes de encarar la que será la última, el sábado, con llegada en Arrubal.